La retinografía es una de las pruebas básicas de la consulta de oftalmología: una fotografía de la retina o fondo de ojo que forma parte del examen oftalmológico que cualquiera debería realizarse periódicamente, especialmente a partir de los 40 años, para prevenir cualquier enfermedad visual. Es muy sencilla y permite detectar alteraciones muy precoces. Nos lo cuenta la optometrista de visiõnclinic+ Emma Pons.